El 14 de agosto de 1995 se produjo «La Batalla del Britpop» cuando Blur y Oasis se disputaron los oídos de la juventud inglesa y el Número 1 en el Reino Unido.
Nos referimos a la contienda denominada por la NME como «La Batalla del Britpop», que resultó ser un carnaval para los fans y los medios de comunicación, hace 29 años.
Fue el día que dos de las bandas más populares de Inglaterra lanzaron sus sencillos en esa misma fecha, para competir y sembrar la emoción en todo el público inglés.
Esos sencillos eran: «Roll with it» de Oasis y «Country House» de Blur, que se ubicaron en una esquina del cuadrilátero.
A diferencia de la “British Invasion”, que dominó las listas de éxitos en los EE.UU con The Beatles y Rolling Stones en los 60s; a comienzos de los años 90s, en Inglaterra ocurría todo lo contrario, ya que el UK Single Chart estaba cargado con un repertorio de grupos yankis como: Nirvana, Pearl Jam y 4 Non Blondes, por lo que los oídos de los jóvenes ingleses estaban perdiendo su “identidad”.
Los sellos discográficos como la EMI o Virgin, estaban desesperados por encontrar a un nuevo “salvador de la música británica” y los periodistas de la NME y de la extinta Melody Maker, salían a las calles en busca de unos nuevos The Smiths o The Jam, para contrarrestar la fuerza proveniente del otro lado del océano y, por sobretodo, tener la primicia de ello.
El sonido británico se encontraba en stand by en 1991, con unos Stones Roses que solo habían sacado un disco en 1989 y con la aparición de bandas ultra independientes denominadas por los críticos como shoegaze (My Bloody Valentine, Pale Saints, Ride, Chapterhouse o Catherine Wheel), quienes no buscaban el éxito que ostentaban otras estrellas de rock, sino todo lo contrario, su búsqueda era reinventar el sonido de las guitarras y las voces, gastando miles de euros en acustizar salas de grabación, para luego lanzar discos que nadie compraba.
Pero luego comenzaron a aparecer bandas prometedoras como Suede, Ocean Colour Scene, The Verve y Blur, quienes junto a los veteranos Pulp, eran la gran apuesta de la prensa musical inglesa, en respuesta a la invasión grunge.
La NME bautizó a esta escena como “Britpop”, para señalar a una nueva ola de bandas salidas de diferentes ciudades y que reunían a un público juvenil sin distinción de clases sociales, ya que llegaban tanto a los hooligans, como a los nietos de la Reina Isabel II.
La bandera del Imperio Británico era abrazada por los jóvenes después de muchos años y eran flameadas en los conciertos, como símbolo identitario de ese nuevo pop inglés que quería reconquistar la Colonia.
Para 1994, Blur lanzó su tercer álbum ‘Parklife’, que llegó al número 1 en Inglaterra y se colocaban el traje de la fama y del buen vivir.
Luego, otra banda con tanto talento como arrogancia, iban a encargarse de hacerle saber a todo el mundo, que ellos eran «los mejores» y no solo dentro de su país.
Era una banda liderada por dos hermanos que se cansaron de robar equipos de sonido y ser “plomos” de otras bandas de su natal Manchester, por lo que decidieron crear: “La mejor música que se haya escuchado en Gran Bretaña en los últimos 30 años”, su nombre era Oasis.
En ese mismo año, el «Britpop» se terminó de afianzar con el lanzamiento del disco debut de Oasis, ‘Definitely Maybe’ (1994), que fue un éxito rotundo y también llegaron al número 1.
Con el buen recibimiento del público británico a estas propuestas y tras la muerte de Kurt Cobain, el sonido británico estaba listo para su contraofensiva.
Entonces, llegaría el año 1995, tras el furor marketinero del britpop, la moda y romantizar a la «gente común» de clase obrera, llegaba el gran choque de dos pesos pesados.
Según el documental ‘The Britpop History’, del director John Harris, todo empezó en una fiesta del sello Creation Records, cuando Liam Gallagher se burló de Damon Albarn gritándole: «number 1, number 1», por el tema «Some Might Say» de Oasis, que estaba en primera posición.
El siguiente sencillo de los Gallagher era «Roll With It» y salía el 14/08/95, mientras que Blur lanzaba «Country House» una semana después, hasta que Albarn y su disquera Parlaphone, decidieron romper el «pacto de caballeros» y adelantaron el lanzamiento para la misma fecha que Oasis, creando así un gran revuelo mediático que pasó de los semanarios musicales como la NME o el Melody Maker, para salir en los principales diarios y en los noticieros de Inglaterra.
Finalmente llegó el día tan esperado y las tiendas de discos abrieron sus puertas para lo que fue un truco de marketing beneficioso para ambas banda en lo comercial, pero donde se jugaban su orgullo, delirio, ego y ninguno quería perder.
Los resultados se dieron a conocer recién el 20 de agosto, cuando la BBC anunció que la batalla terminó con victoria de Blur, por un margen de 58 mil copias vendidas: «Country House» vendió 274 mil copias y «Roll With It», unas 216 mil.
Desde ese entonces, la rivalidad duró muchos años, hasta que un Noel Gallagher, peleado con su hermano, se amigó con Damon Albarn en el 2011, luego de pedirle disculpas por haber dicho a la prensa: «Ojalá que Damon Albarn y Alex James se contagien de HIV», tras la derrota de Oasis, en la Batalla del Britpop.
En 2019, Noel volvió a recordar la contienda y dijo que fue una disputa entre los peores sencillos de Blur y Oasis.
Textos: Orlando Salerno.