Por Orlando Salerno.
Entrevistamos a Ken Casey, cantante de la legendaria banda celtic punk de Boston, Dropkick Murphys, por el lanzamiento de su nuevo álbum, y por los 15 años de su reconocimiento masivo gracias al soundtrack de The Departed.
El grupo bostoniano formado en 1994 lanzó su décimo álbum de estudio titulado ‘Turn Up That Dial’ en todas las plataformas digitales.
El mismo contó con un proceso de grabación sin precedentes para una banda que siempre funcionó de manera orgánica, pero debido a la pandemia, los Dropkick Murphys tuvieron que aprender a trabajar -en parte- de forma remota.
Ken nos comentó acerca del ambiente político post Trump, el negocio del streaming, su visión sobre la actualidad del rock norteamericano y de cómo su canción «I’m Shipping Up To Boston» fue elegida para aparecer en la película ganadora del Oscar, The Departed (2006), del director Martin Scorsese.
- Ken, háblame de este nuevo álbum, que suena como si se tratara de un periodo pre-pandémico.
Gracias por tus palabras, pero tengo que ser honesto contigo. Nosotros teníamos estas nuevas canciones listas a finales del 2019 y cuando estábamos por entrar al estudio, estalló el Covid.
Por esa razón tuvimos que trabajar algunas partes desde nuestras casas y unir las piezas de un rompecabezas, algo que nunca antes hicimos. Siempre fuimos una banda que trabaja en equipo y disfruta mucho hacerlo juntos.
Pero estamos contentos con el resultado, es un disco muy positivo, pese a lo que se está viviendo y me alegra que te haya hecho sentir «pre-pandemia».
- Muchos artistas cambiaron la dirección de sus discos tras la aparición del virus y enfocaron sus ideas en hacerlo «más positivo» o «alegre» para el público en general. ¿Lo de ustedes estaba planeado de antemano?
Si, como te dije, teníamos estas canciones en diciembre de 2019 y luego salimos de gira en enero y febrero de 2020, hasta que el confinamiento comenzó en marzo.
Desde un principio quisimos cambiar un poco lo que habíamos hecho en el disco anterior, que si bien no es un disco «deprimente», hablaba mucho sobre personas de nuestras vidas y de nuestra comunidad que morían por sobredosis de heroína.
Por eso quisimos hacer canciones un poco más alegres y llevaderas en este disco, luego vino la pandemia y dijimos que realmente sí debemos hacer un disco más alegre y llevadero.
- Sus shows en vivo se basaban en la interacción directa con el público, mucho pogo, stage diving, cosas que ahora están prohibidas.
Si, definitivamente estamos en un largo periodo intermedio. Pero creo que pronto volveremos a tener una vida normal 100%.
- Nunca se es viejo para ser punk, pero muchos temen volverse muy viejos para cuando regresen los pogos.
(Risas) es cierto, pero por ahora hay que enfocarse en tener esperanzas.
- Siendo de Boston, una ciudad de clase trabajadora, universitaria y política, ¿cómo ves el EE.UU post Donald Trump y qué esperas de la administración Biden-Harris?
Creo que tuvieron un buen inicio, muchos fueron vacunados y muchos recibieron dinero del gobierno tras perderlo todo por la situación.
Anteriormente, Donald Trump sólo pensaba en Donald Trump, y un poco en sus amigos ricos. Pero logró engañar a la mitad de los americanos en hacerles creer que le importaba la clase obrera, nunca entendí cómo pasó eso.
Creo que desde que no está Trump, la gente está más calmada, seguimos divididos, pero ya no estamos tan enojados como antes y creo que Joe Biden y Kamala Harris están haciendo un gran trabajo.
- Ya no vemos a muchas bandas de rock americanas de clase obrera en el mainstream. Al menos desde un tiempo a esta parte.
Yo creo que el mainstream y todo lo que dije de Donald Trump, se basa en la idea en que tenemos que pelear entre nosotros, los de la clase trabajadora, en lugar de hacer frente a las corporaciones que hacen millones a través de sus sellos.
Nosotros somos una banda que, creo yo, es «demasiado» para una radio mainstream, porque no quieren pasar un grupo que critica a la otra mitad de la población, sobre todo a la más poderosa.
Pero hay muchas bandas interesantes que vienen de la clase trabajadora, pero viven de la «gig economy» (economía de conciertos), generan dinero de sus shows, pero no llevan una buena calidad de vida, no tiene seguro médico y no saben que deberían de recibir todos estos beneficios de sus empleadores, que serían los del sello.
- La brecha entre número de audiencia y número de ganancias económicas para los músicos, que provienen de los servicios de streaming, se hicieron más visibles desde la cancelación de los shows en vivo.
El negocio de la música cambió, ya no ganás dinero con la música que publicas, lo haces para promover una gira y hacer dinero en los conciertos.
Todo el mundo se da cuenta de lo poco que nos dan, pero tampoco hay una fuerte unión de músicos para plantarse a Spotify. Y es complicado, porque si sacás tu música de Spotify, dejás de existir, porque sólo se escucha desde ahí.
- Van a cumplirse 15 años del estreno de The Departed. ¿Cómo Martin Scorsese escogió «I’m Shipping Up To Boston» que se volvió tan icónica?
Cuando Martin Scorsese nos pidió para usar ese tema, muchos de mis amigos, quienes tuvieron pequeños roles como extras en la película, nos decían que ellos le sugirieron a Scorsese para que usen nuestra música y se tomaron el crédito por eso.
Pero nunca supe cómo sucedió, hasta que muchos años después leí un artículo en la Rolling Stone, que decía que Robbie Robertson, del grupo The Band, era quien elegía los temas de los Stones para esas escenas cool de Scorsese y fue quien también recomendó nuestra canción. Así que mis amigos de Boston son todos unos mentirosos (risas).
Escuchá el nuevo álbum de los Dropkick Murphys, ‘Turn Up That Dial’, a continuación: