Por Orlando Salerno.
El Cuarteto de Nos actuó ante una multitud en el Arena SND, donde presentaron el grueso de su repertorio más popular en una húmeda noche que transpiró y cantó cada canción del grupo uruguayo.
La banda proveniente de Montevideo ofreció el show más importante de su longeva carrera en Asunción, en el marco de su Tour Lámina Once 2024, que colmó la Secretaría Nacional de Deportes, en la noche del sábado 15 de junio.
El público fue clave para acompañar cada ráfaga de palabras que salían de la voz del cantante Roberto Musso, un hombre de más de 61 años, que lidera esta banda que logró convocar a niños, adolescentes, jóvenes adultos y hasta personas de la tercera edad, que gozaron durante dos horas y media de concierto.
El grupo inició su set con el tema que también da inicio a ‘Lámina Once’, su última placa discográfica, hablamos del tema «Flan», el tema cuyo título se basó en una foto viral del ex presidente argentino, Mauricio Macri, en la que se lo ve riendo «mientras come un flan».
Un potente preámbulo de una larga noche que no dio descanso en las siguientes canciones como «Hijo de Hernández», «Ya no sé qué hacer conmigo» y «Lo Malo de Ser Bueno», hasta de saludar al público presente.
El grupo de esa manera continuó con su exitosa trilogía de discos ‘Raro’, ‘Bipolar’ y ‘Porfiado’, antes de interpretar «Roberto» de su álbum ‘Habla Tu Espejo», que este año celebra su décimo aniversario.
De esa manera, llegaba el turno de presentar más canciones que los trajeron de vuelta, desde su último disco: «Chivo Expiatorio» y el encantador «Frankenstein Posmo», que fueron interpretados por primera vez en Asunción.
Antes de presentar el siguiente número, Roberto comenta una anécdota acerca de un chiste de ingenieros (siendo él uno de sistemas) acerca de «¿cual es el colmo entre el espacio y el tiempo», cuyo remate fue: «No tengo tiempo para contarlo». Fue así que sorprendieron con la canción «Como para el Tiempo», que fue muy celebrado por los fans.
La humedad y el calor no debuto al veterano grupo que lo estaba dando todo y faltaban sus números más exigentes, como el ultra pogueable «Mario Neta» y la ametralladora de versos «Maldito Show», antes de su último gran hit «Cinturón Negro».
Llegó el momento de hacer un descanso, pero no para Musso, quien quedaba solo en la tarima, discutiendo con la pantalla que lo desafiaba a una batalla de freestyle, la super innovadora «Contrapunto para humanos y computadora», cuyo video lanzado en 2019 anticipó de alguna manera lo que fue la pandemia, con shows en teatros vacíos y músicos actuando frente a una computadora.
Una vez que retornó el resto de los músicos, presentaron «Rorschach» y la mega sensible «No llora», que representó la cuota de emoción más grande a un ya de por sí divertido recital.
Y cuando parecía que todo estaba por llegar a su fin, el Cuarteto redobla apuesta con «Hombre con alas», «Gaucho Power» y «Miguel Gritar» e «Invierno del 92», antes de cuarto intermedio con representó una elección de canciones apabullantes.
Fue así como concluyó el primer acto del grupo que retornó para despedirse con «Buen Día Benito» y «Nombres», para luego despedirse con el tema marcó el momento bisagra en sus carreras, «Yendo a la Casa de Damián», el sencillo que les abrió las puertas al mundo desde un pequeño país como Uruguay.
Y fue así que finalizó una fecha muy importante para los paraguayos fans de esta agrupación que sobrevivió a muchos acontecimientos, como un intento de censura en democracia y la salida de varios integrantes originales, pero de alguna manera siguen adelante, pese al paso de los años, que a su vez, los acerca a nuevas generaciones que los llenan de energías en cada concierto y este paso por el SND no fue la excepción.
