Niegan libertad condicional a Mark David Chapman, el asesino de John Lennon, por decimosegunda vez.
Chapman, de 67 años, le disparó fatalmente al ex Beatle en la entrada del edificio Dakota, en la ciudad de Nueva York, en diciembre de 1980.
El músico y Yoko Ono regresaban a su departamento ubicado en el Upper West Side, después de una sesión de grabación. Lennon había firmado un autógrafo para Chapman ese mismo día.
Chapman compareció ante una junta de libertad condicional a fines del mes pasado, según el Departamento de Correcciones y Supervisión Comunitaria del estado (vía Billboard).
Funcionarios penitenciarios de Nueva York dijeron ayer (12 de septiembre) que se le había negado la libertad condicional una vez más a Chapman, por lo que debe comparecer ante la junta de libertad condicional en febrero de 2024.
El asesino apeló sin éxito para la libertad condicional en agosto de 2020 y luego tuvo que esperar otros dos años antes de ser elegible para otra.
Las transcripciones de la entrevista de la junta directiva más reciente de Chapman aún no están disponibles. Sin embargo, en su audiencia anterior calificó sus acciones como “despreciables” y dijo que “no tendría queja alguna” si permanecía en prisión por el resto de su vida.
En ese momento, Chapman explicó que «buscaba mucho la gloria personal» al asesinar a Lennon. “Lo asesine porque era muy, muy, muy famoso y esa es la única razón”, dijo. «Muy egoísta».
Durante su apelación de 2018, Chapman dijo que cada año sentía “más y más vergüenza” desde que cometió el crimen. “Hace treinta años no podía decir que sentía vergüenza y ahora sé lo que es la vergüenza”, explicó.
Chapman actualmente cumple una sentencia de 20 años a cadena perpetua en el Centro Correccional de Green Haven, que se encuentra al norte de la ciudad de Nueva York, y se declaró culpable de asesinato en segundo grado.