Este fin de semana se conmemora un nuevo aniversario de la trágica muerte del actor River Phoenix, ocurrido en la noche de Halloween de 1993.
Phoenix tenía 23 años y una prometedora carrera en el cine, pese a que ya contaba con una prolífica carrera, en la que fue nominado al Oscar como Mejor Actor de Reparto, a los 18 años, por su rol en la cinta ‘Running on Empty’ de 1988.
El mismo a la fama en 1986, luego de protagonizar la película Stand By Me, cuando tenía 15 años de edad.
Era hermano mayor del futuro actor ganador del Oscar, Joaquin Phoenix, quien estuvo con él en aquella fatídica noche, en la que River sufrió una accidental sobredosis de drogas, en la vereda del Sunset Strip en Hollywood Boulevard, Los Ángeles.
Los hermanos, en compañía de la novia de River, la actriz Samantha Mathis, habían asistido al recientemente inaugurado pub nocturno llamado The Viper Room, propiedad del también actor Johnny Depp.
River venía de pasar meses en el lejano estado de Utah, donde se encontraba filmando la película ‘Dark Blood’, que no logró completar.
Tras su arribo a Los Ángeles, se hospedó en el hotel Nikko de Beverly Hills, donde también se encontraba el director alemán George Sluizer, quien dirigía a River en ‘Dark Blood’.
En ese hotel, la estrella se encontró con su hermana menor Rain, su hermano menor Joaquín (quien se hacía llamar Leaf en aquel entonces) y con su novia Samantha, con quien hizo la película The Thing Called Love, que se estrenó tras la muerte del actor.
Según el libro The Last Night At The Viper Room, fueron al bar de Depp por insistencia de Joaquín, de 18 años, quien quería ver a la «superbanda» de amigos llamada P, formado por músicos famosos como: Flea y John Frusciante de los Red Hot Chili Peppers, más el cantante de The Butthole Surfers, Gibby Haynes, y el propio dueño del bar, Johnny Depp.
Todos ellos eran amigos de River también, quien llevó su guitarra acústica, por si había una posibilidad de tocar con ellos, ya que no era un conjunto de rock serio, sino más bien uno para divertir a sus amigos, contar chistes internos.
Al llegar al pub, fueron directo a la zona VIP, donde Flea (co-estrella de River en My Own Private Idaho) le dijo al actor que no había lugar para él en el escenario y que el sonidista no iba a microfonear su guitarra acústica.
Esa noticia había frustrado a River, quien luego ingirió un vaso de una bebida que John Frusciante le pasó y que no debía bebérsela toda, sino compartir entre varios, ya que se trataba de una droga llamada «speedball», un peligroso cocktail de heroína y cocaína que estaba de moda en aquel entonces y que fue la misma que mató al comediante John Belushi en 1980.
River pasó sólo 45 minutos en el Viper Room, de donde salió arrastrado por sentir que se le acababa el aire y sufrió convulsiones en la acera, frente al bar, lleno de gente disfrazada por Halloween, que no lo reconoció a simple vista, ya que el mismo contaba con el cabello corto teñido de castaño, por su papel en Dark Blood.
No se parecía al famoso River Phoenix, de pelo largo y rubio, que todo el mundo vio brillar haciendo del joven Indiana Jones en The Last Crusade (1989), entre otras películas.
Mientras River se encontraba convulsionando, Joaquín realizó una llamada desesperada al 911, donde no sabía explicar qué le pasaba a su hermano mayor y pedía a gritos que llegue una ambulancia.
Cuando todo eso ocurría, irónicamente, la banda P estaba tocando un tema suyo, llamado «Michael Stipe», en cuyo inicio nombran al cantante de REM, a Flea y a River Phoenix.
«I’m glad I met old Michael Stipe, I didn’t get to see his car. Him and River Phoenix were leaving on the road tomorrow».
«But we didn’t have a part, not a piece of our heart, not Michael, River Phoenix or Flea or me».
Al enterarse lo que ocurría, Flea sale del escenario y acompaña a River en la ambulancia, que llegó al Cedars-Sinai Medical Center, donde fue declarado muerto en las primeras horas del 31 de octubre de 1993.
El LA Times reportó en su momento que un fotógrafo/paparazzi, de nombre Ron Davis, vio a Phoenix convulsionar y en lugar de sacarle una foto (que hubiera valido millones de dólares) prefirió asistir al joven actor.
“Lo dejaron en la acera de espaldas y ahí fue cuando comenzaron las convulsiones», señaló Davis. «Estaba convulsionando tanto que parecía un pez fuera del agua».
El fotógrafo también dijo que quedó consternado al ver cómo los transeúntes trataron lo que ocurría con tanta indiferencia, como si fuera «un espectáculo de monstruos de Halloween en Hollywood».