Ellen DeGeneres dio inicio a la nueva temporada de su programa matutino con un monólogo acerca de las acusaciones de «ambiente laboral tóxico» en su producción.
La comediante y actriz tuvo que disculparse en su regreso a la pantalla chica y señaló que «esas cosas nunca debieron ocurrir”.
“Sé que estoy en una posición privilegiada y de poder y entiendo que eso conlleva una responsabilidad, y asumo la responsabilidad de lo que ocurre en mi programa”, dijo la presentadora y comediante en un video publicado el lunes.
“The Ellen DeGeneres Show” comenzó su 18va temporada en Los Ángeles con la anfitriona en el escenario por primera vez en meses, tras haber grabado en su casa durante la cuarentena. No hubo audiencia en el estudio, pero sí una virtual, con rostros en monitores colocados en los asientos.
“Hemos tenido muchas conversaciones durante las últimas semanas sobre el programa, nuestro sitio de trabajo y lo que queremos para el futuro”, dijo DeGeneres. “Hemos hecho los cambios necesarios y hoy comenzamos un nuevo capítulo”.
Una investigación interna de las condiciones de trabajo fue desatada por un reporte de BuzzFeed News publicado en julio, basado en 36 entrevistas con ex personal que se quejó de haber sido víctima o testigo de un trato inapropiado e injusto. Las personas que hicieron las acusaciones no fueron identificadas.
“Me enteré de que aquí pasaron cosas que nunca debieron ocurrir. Me tomo eso muy en serio, y quiero decir que lo siento mucho por la gente que fue afectada”, dijo DeGeneres en su monólogo.
La humorista había enviado un memorando a su personal tras el reporte de BuzzFeed, en el que recordó su promesa inicial de asegurar un lugar de trabajo donde “todos sean tratados con respeto”.
En su momentos, estrellas como Katy Perry defendieron a Ellen DeGeneres, después de que miembros de su equipo alegaron maltratos laborales de su parte.